Hoy en día, al vivir rodeados de inmediatez, presionados por la autoexigencia e influenciados por las redes sociales y otros agentes externos, es muy difícil saber qué es lo que nos está afectando negativamente y quiénes somos en realidad. Esto, unido a las muchas posibilidades a las que estamos expuestos, dificulta la toma de decisiones y crea una carencia de objetivos claros que genera como consecuencia inseguridad, frustración, baja autoestima, etc.
Lo entiendo. Todos hemos estado allí y es un lugar difícil en el que estar.
Cuando nos sentimos estancados, cansados y frustrados por cómo van nuestras vidas y nuestras relaciones, el cambio nos puede parecer imposible. Puede que pensemos «esto no es lo que se suponía que iba a ser la vida para mi». Y también es posible que sintamos que ya no podemos hablar de lo que nos está sucediendo con amigos/as y/o familiares, o que incluso podamos imaginar que hay algo mal con nosotros/as mismos/as por sentirnos de esta manera.
La buena noticia es que podemos usar estos períodos dolorosos de la vida para aclararte y poder hacer movimientos alineados hacia la vida que realmente sueñas para ti mismo/a. Y no tienes que pasar por esto solo/a.
¿Por qué?
Porque trabajando juntos podremos curar viejas heridas emocionales, descubrir y comprender cualquier patrón y comportamiento autodestructivo que se esté desarrollando o manteniendo, y reemplazarlos con nuevos comportamientos y creencias que te ayudarán a acercarte más a la vida que imaginas para ti mismo/a. La psicoterapia es un proceso de exploración interna que conduce a una comprensión más profunda de cómo te relacionas contigo mismo/a, con los/as demás y con el mundo en general.
Considero que se debe ser muy valiente para enfrentarse a uno mismo/a, por lo que respeto profundamente a todas aquellas personas que se sientan delante de mí y que tienen por objetivo mejorar su calidad de vida a través de un proceso terapéutico.